En los últimos años Tamerlan había cambiado.
Cada vez más religioso y radical empezó a influenciar fuertemente en su hermano Dzhokhar. Pero ¿cómo dos jóvenes con todo un futuro por delante acaban poniendo tres bombas en la maratón de Boston y matando a tres personas?
Ambos nacieron en el antiguo territorio soviético ahora conocido como Kirguistán, en un barrio de clase trabajadora, Inman Square. Los dos jóvenes
compartían una aguda inteligencia y la voluntad de trabajar duro, según publica el 'Boston Globe' tras haber entrevistado a su entorno más cercano.
Sin embargo, de cara a la galería los hermanos parecían completamente distintos. Tamerlan llegó a los EEUU cuando era un adolescente, mientras que Dzhokhar era un niño de tan sólo 10 años cuando sus padres emigraron al país de las oportunidades. Pronto su familia prosperó. Su padre, abogado en la República de Daguestán, donde residían tras huir de Kirguistán,
comenzó a trabajar como mecánico para una fábrica de automóviles, mientras que
su madre era cosmetóloga.
Su hijo mayor, Tamerlan, un boxeador amateur
descrito por algunos como distante y arrogante, aspiraba a ser ingeniero, pero abandonó sus estudios en el Bunker Hill Community College para dedicarse por completo al boxeo.
Mientras, Dzhokhar,
capitán del equipo de lucha y miembro del cuadro de honor de la escuela donde estudió secundaria, estaba matriculado en el segundo año de biología marina en la Universidad de Massachusetts, y residía en una residencia de estudiantes.
"Si alguien me preguntara como era este chico, yo diría que
tenía un corazón de oro", ha afirmado al 'Boston Globe' Larry Aaronson, profesor Dzhokhar en el público de Cambridge donde estudió.
Según defendió Peter Payack, uno de sus entrenadores de lucha en la escuela pública, "era un chico totalmente normal, como cualquier niño estadounidense", dijo a CNN,
"era inteligente, divertido, es difícil de creer".
Dzhokhar estaba completamente integrado en la sociedad estadounidense. Se apuntó como voluntario al programa Best Buddies, que ayuda a personas con discapacidad. Y el 11 de septiembre de 2012, un año y medio después de su graduación en la escuela secundaria, Dzhokhar Tsarnaev se convertía en ciudadano naturalizado de EEUU tras pasar una verificación de antecedentes penales, un programa de educación cívica de Estados Unidos, una prueba de Inglés, y completar una entrevista con un funcionario de inmigración federal.
Mientras Tamerlan, el hijo mayor, se convirtió en un boxeador amateur, emulando a su padre (fue boxeador en Kirguistán), quien le ayudó a entrenar. Boxeó en la categoría de peso pesado y llegó a competir a nivel profesional.
Sin embargo, EEUU no era tan maravilloso como lo era para su hermano. El joven, que representó a la región de Nueva Inglaterra en la categoría de pesos pesado, confesaba que aunque había llegado a EEUU de niño no tenía "ni un amigo estadounidense";
"no les entiendo", añadía.
Tamerlan estaba casado con una mujer estadounidense, Katherine, con quien
tenía una niña de tres años y que se había convertido al Islam, religión que tanto él como su hermano profesaban.
Un cambio radical
El cambio de ambos se produjo en los últimos años. Los problemas llegaron a la familia y
ambos hermanos empezaron a mostrar signos de un creciente extremismo.
Los padres se divorciaron, y pasaban largos periodos de tiempo en Rusia. La madre de los sospechosos, Zubeidat, fue detenida en junio de 2012 en Natick y acusada de robo tras robar varios vestidos, valorados en 1.952 dólares.
Maret Tsarnaeva, tía de sospechosos, ha explicado que, por ejemplo, Tamerlan pasó de rezar una vez al día a hacerlo al menos cinco.
"Empezó a hablar de religión", afirmó un familiar que no ha querido ser identificado.
"Se dejó la barba larga", añadió. Un vecino de Norfolk Street en Cambridge, dijo que él también notó un cambio en la apariencia de Tamerlan hace aproximadamente un año, cuando comenzó a usar vestidos de lino blancos largos.
Una cuenta de YouTube, creada en nombre de Tamerlan Tsarnaev en agosto de 2012, incluye en una lista de reproducción de un vídeo dedicado a la profecía de las Banderas Negras de Jorasán, que al parecer es abrazado por los extremistas islámicos.
En otro video, que figuran en una lista de reproducción titulada "terroristas", un orador sostiene un rifle de asalto y lleva un uniforme de camuflaje mientras es flanqueado por hombres armados enmascarados.
Mientras, Dzhokhar también daba muestras de su cambio. En 2011 contactó con un profesor de la universidad para pedirle información sobre la historia de Chechenia. "Quería descrubrir sus raíces y su identidad", aseguró este profesor.
Sin embargo, en su perfil de una red social empezó a colgar enlaces a páginas web islamistas y exigía la independencia de Chechenia. Además, había colgado vídeos de combatientes en la guerra civil siria y escrito frases como
'Salamworld, mi religión es el Islam' y
'No hay más Dios que Alá, que resuene en nuestros corazones', en páginas web islamistas.
Los que le conocían creen que su transformación se debió en gran parte a la influencia de su hermano. "Yo solía advertir a Dzhokhar que Tamerlan no era bueno para él", asegura Zaur Tsarnaev, uno de los primos. "Tamerlan siempre se metía en problemas. Nunca fue feliz, nunca estaba animando, nunca sonreía... No era un buen hombre".
El FBI ya colocó en 2011 en el punto de mira a Tamerlan Tsarnaev por considerarlo un "islamista radical", aunque no pudo hallar indicios de actividades terroristas, según comunicó la policía federal.
La investigación se basaba en informaciones de que Tsarnaev
era un seguidor del islam radical y un musulmán estricto. A partir de 2010 se transformó completamente, empezó los preparativos para salir de Estados Unidos y unirse a grupos clandestinos en el extranjero del que no se ha ofrecido más información, se indicó.
El FBI señaló que entonces habló con Tamerlan Tsarnaev y con familiares. Se revisaron sus contactos telefónicos, los planes de viaje y los contactos personas sin descubrir nada sospechoso. Entonces, el FBI solicitó a gobiernos extranjeros más información pero no recibió nada.
Obama: 'Los americanos se niegan a que les aterroricen'
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha dedicado su discurso semanal a recordar a las víctimas del
atentado del maratón de Boston, en un comentario en el que aplaudió la valentía de quienes acudieron a auxiliar inmediatamente a los afectados y aseguró que los estadounidenses, a pesar del ataque, "se niegan a que les aterroricen".
"Si alguien quería saber quiénes somos, lo que es América y cómo respondemos ante el mal y el terrorismo, ahí lo tiene:
de manera desinteresada, con compasión, y sin miedo", declaró Obama. "En los días posteriores, el mundo ha sido testigo de una verdad segura e inalterable: los americanos se niegan a que les aterroricen".
Obama, quien aseguró que la nación "permanecerá vigilante en los próximos días", tuvo palabras para los "valientes" efectivos de emergencia que acudieron en primer lugar a la escena del atentado, así como a los voluntarios, espectadores "y corredores agotados" que se aproximaron a ayudar. "Entre ellos se encontraban soldados y veteranos que jamás se imaginaron ver semejantes escenas en sus calles", declaró.
Asimismo, el presidente de Estados Unidos recordó a enfermeras y doctores que atendieron durante toda la noche a los heridos, y en general a la gente "de gran corazón" de Boston que
"llevaron a las víctimas en sus brazos, aportaron agua y mantas, hicieron cola para donar sangre y abrieron sus casas a completos extraños".
Por último, el presidente aplaudió la labor de las fuerzas de seguridad y lamentó "los sacrificios en nombre del deber", en una referencia al agente Sean Collier, muerto en el Instituto Tecnológico de Masachussetts durante un tiroteo con los sospechosos del atentado.
"Al final, eso es lo que recordaremos de esta semana. Esto es lo que quedará. Historias de heroísmo y bondad, resolución y constancia, generosidad y amor", concluyó el presidente.
"Nuestra fe en nosotros mismos, nuestro amor por este país, el credo común que atraviesa cualquier diferencia superficial que podamos tener, eso es lo que nos hace fuertes. Por eso resistiremos".
http://www.elmundo.es/america/2013/04/20/estados_unidos/1366480622.html
